Debe haberle ocurrido más de una vez al trotar o correr: experimentar ese dolor que se siente en el costado derecho del cuerpo debajo de las costillas, a la altura del hígado. Se trata de las famosas puntadas abdominales o punzadas abdominales.
Son causados por un impulso hacia abajo de los órganos internos que produce la carrera, afectando principalmente a quienes están pocos habituados a la actividad física.
El órgano afectado es el hígado, ya que normalmente contiene más o menos el 25% de la sangre total del cuerpo.
Para evitar estas incomodas puntadas abdominales es recomendable tomar algunas medidas preventivas:
- No correr con el estómago lleno.
- Realizar ejercicio de manera progresiva; de más suave a más intenso.
- Hacer ejercicios para fortalecer los músculos abdominales.
- Respirar adecuadamente durante la carrera.
Todo esto permite que los músculos del estómago se relajen y los órganos internos tengan una mayor libertad de movimiento.
Ante la aparición de una puntada es aconsejable detenerse, recostarse y respirar profundamente o permanecer de pie respirando profundamente al mismo tiempo que se inclina hacia adelante y se presiona la zona afectada.
